sábado, 17 de agosto de 2013

Bichos...os odio!

Cuando llegué hace tres años a este piso, a los pocos meses de morar en él descubrí que en primavera la cocina era colonizada por un enjambre de abejas.
Un día al cruzar la puerta de entrada pensé que había un robot descabezado en la cocina, se escuchaba un fuerte bzzzzzzz bzzzzzzz, que me recordó al ruído que emiten los robots al ser decapitados. Cargada de bolsas de la compra hasta las cejas me acerqué a la cocina y, ante mi estupor, había alrededor de 30 abejas sobrevolando la lámpara. Sin darme cuenta solté las bolsas de una mano y además de abejas obtuve una magnífica tortilla de huevos rotos.
En aquella ocasión solté las bolsas, cerré la puerta de la cocina y salí corriendo por la de entrada. Bajé a la calle (iba permitirme la licencia poética de decir que me fumé un cigarro para reflexionar, pero por aquel entonces no fumaba), reflexioné sin fumar y seguí sin saber qué hacer. Subí al cabo de un rato y ya no estaban. Tuve alguna pesadilla durante algunos días, soñándome con la cara hinchada llena de picaduras ultrapolinizadas.

Antes de empezar las vacaciones, pasé unos días muy apurada, muy empanada, muy al límite de ser persona. La alarma a este estado de no saber si iba o venía, sonó una mañana que preparé la cafetera (soy una antigua que bebe café guarro de cafetera eléctrica de antaño, nada de Nespresso). Puse agua, llené el filtro desechable de papel, encendí la cafetera y no volví a poner la jarra. Al salir de la ducha el aroma a café recién hecho me envolvió de tal manera que supe al instante que algo no iba bien. Asomé la cabeza aún con el pelo chorreante y las mismas cascadas de agua que caían por mi espalda salían de la cafetera goteando café hasta el infinito y más allá.
En la misma semana este episodio se produjo dos veces. 

Ahora, más descansada, me fijo mucho en lo que hago. Esta mañana me he tomado mi tiempo en preparar la cafetera, a mi espalda se oía todo el rato ese ruído de robot decapitado bzzzzzz bzzzzzzz. Miraba hacia el techo y no veía nada, no había ningún cuerpo alado volando por la cocina, sin embargo el bzzzzzzzz bzzzzzzz era cada vez más insistente. Me he quedado muy quieta y he intentado reconocer de donde provenía exactamente el zumbido. Lentamente he girado mi cabeza y voilà!


Una avispa muy hija de puta estaba haciendo su tercer módulo en un complejo residencial de adosados avespiles en la parte superior del cristal de un armario (esa especie de puros habanos chiquitos) que se ven en la esquinita. He mantenido una árdua discusión con ella, ha intentado agredirme y luego, asustada por mis aspavientos, ha salido volando/huyendo por la ventana. Rápidamente he procedido al derribo de esa nueva urbanización en mi cocina.

No sabéis el asquito que daba. Luego alguien muy entendido me ha contado que construyen sus residencias de verano con alas de mosca...


Un comienzo de día grandioso.



martes, 13 de agosto de 2013

El ser y el no estar

Hace justo dos años que leí "Bella del señor". Y me arrebató completamente. Me costó seis meses poder hacerlo, por su densidad, por la forma en qué está escrito y, sobre todo, porque tantas veces tuve que cerrarlo ya que las lágrimas no me dejaban ver las letras. En aquel momento mi corazón se ahogaba roto.

Es la historia de amor más brutal que he leído en mi vida, al menos por el momento. La he recordado tantas veces ... y ese final, tan crudo y a la vez romántico ... .

El amor muchas veces es jodido y duele.

Y la idealización, en ocasiones, cuando se vuelve tangible, cotidiana, se diluye como una cucharada de sal en el mar.

El mar ... otra vez el mar.

Hace justo un año, para no perder las sanas costumbres y pese a la distancia física y mental, escribí  esto ... este año no voy a estar cuando llegue el día 13 de agosto, no podré escribir nada parecido.

Pero más que no poder, lo peor es que siento que no sé si sabría hacerlo.

Finalmente el mar, el mismo de siempre, nuestro mar, fue testigo de tanto amor ... y ahora nos arrastra hacia un torbellino de desencuentro.

Y te quiero. Cada minuto que pasa te quiero. Pero nos duele tanto que ya casi ni eso. Somos piedra.

Deberíamos poder ser felices. Pese a no estar.

Feliz día. Feliz vida.








miércoles, 7 de agosto de 2013

El MARATÓN de agosto...



Me pregunta si ya he hecho vacaciones, si estoy de vacaciones o cuando tengo previsto hacerlas. Respondo que aún no, que todavía toca currar esta semana y luego por delante tengo un ansiado mes entero para el dolce far niente.
Me pregunta si tengo planes, si me voy de viaje o a pasar unos días fuera. Respondo que no, que me quedo, que mis planes son without plans...improvisación y estar en casa.

Estos últimos quince días he oído hablar de todo tipo de modelos vacacionales: visitas a familiares (parece que en alza, la crisis dicen), viajes con el novio, camping con los niños, visitar ciudades, ir a países remotos... Cada uno cuenta "sus planes". En el trabajo si vas a prepararte un café y hay alguien haciendo lo mismo, lo encuentras narrando sus futuras agendas ociosas.
Ayer, mientras esperaba que se llenara mi taza de oro negro, alguien me preguntó si tenía alguna actividad preparada...tuve que mentir. Bueno, solo un poco, más que mentir fue obviar. Desde el domingo pasado tengo un plan para el mes de agosto.

Después de haber hecho la locura de andar 300km. el verano de 2011, puse a dios por testigo que jamás volvería a utilizar mis días de asueto y descanso para agotarme, y mucho menos todavía, para caer en la extenuación.
Pero la oferta que está ahí en el aire me tienta. Me tienta mucho.
Recibo por e-mail el siguiente mensaje:

ASUNTO: Maratón de agosto
TEXTO: Kit, la semana del 19 al 25 de agosto estaré en Barcelona, y por lo que me dijiste tú también. ¿Hacemos un maratón sexual? Te propongo pasar juntos toda esa semana desde las 20:00 horas hasta las 8:00 horas del día siguiente. Yo estoy en forma para aguantar (y me parece que tú también), ¿te apuntas?. Dime que sí, andaaaa... no recibirás ninguna propuesta mejor para pasar estos días de canícula estival. Besis.

Hoy me he inscrito para participar y he recibido un acuse de recibo y las instrucciones para recoger el dorsal a partir del próximo miércoles.
Sí, ya sé que no cumplo mis promesas ni mis juramentos ante dios y la virgen...pero es que este tipo de extenuación, y sobre todo que el ejercicio no incluya laceraciones en los pies, ha sido decisivo para correr(nos) un maratón en agosto.

¡¡¡¡Felices vacaciones a todos!!!!


LinkWithin

Related Posts with Thumbnails