miércoles, 15 de diciembre de 2010

La vida da muuuuuuchas vueltas ...

Hace unos quince años me pusiste un expediente disciplinario por llegar tarde al trabajo repetidamente. Llegaba cinco minutos tarde cada día. El mismo empeño pusiste tú en controlar esos cinco minutos, que yo en no llegar ni un puto día a la hora. Por mis ovarios toreros. Resultado: dos días de suspensión de empleo y sueldo.

Me jodió mucho la intransigencia, teniendo en cuenta que a la hora de salir, a mis compañeros se les caía el boli a las o'clock, mientras que a mi no me importaba quedarme el rato que fuera para acabar el trabajo. Y aunque la suspensión de empleo me vino bien (fueron unas vacaciones), los dos días sin sueldo me repatearon el mes. Entre otras cosas porque me pagábais una mierda y entonces vivía sola, por lo que a duras penas llegaba al día 15. Por eso, en aquel momento, me pareciste un gilipollas integral y te odié desde lo más profundo de mis veintipocos rabiosos años.

Han pasado quince años y la vida ha hecho que nos volvamos a reencontrar en una circunstancia bien distinta: aquel local en el que entonces trabajábamos treinta personas, actualmente está vacío, porque de esos treinta ahora solamente quedais seis. Y es demasiado local para vosotros, mucho espacio y gastos exorbitantes para una empresa que hoy en día es casi ruinosa. Así que os habeis mudado a un despachito pequeño y buscais arrendatario para el antiguo recinto. Mi actual empresa quiere expandirse y andaba a la caza de local, así que, ¡casualidades de la vida!, han contactado con vosotros para alquilaros el vuestro. Obvia decir que en absoluto influí en eso, yo me enteré cuando me citaron allí para revisar un tema de imagen corporativa, y FLIPÉ MANDARINAS al leer la dirección.

Cuando me presenté, entré de repente en una travesía emocional que me transportó al pasado en cuestión de segundos: en esa esquina estaba mi antigua mesa, delante de esa puerta por donde entré y salí durante 10 años. Allí se sentaba el que ahora es mi marido (lo conocí en el trabajo y fue mi medio-jefe. Pero esa es otra historia). En ese office tomaba café cada mañana con mi compañera Isabel, esa pedazo de persona, inteligente, divertida y excéntrica, que murió de cáncer hace unos años y a la que tanto recuerdo. Y ahi al fondo, la sala de servidores ... pero si todavía estaba la antigua IBM, incorporada en un mueble en el que tenías que introducirte para trabajar con ella, como si fuera una nave espacial! (cualquier mp3 actual tiene bastante más memoria seguramente). Como soy una nostálgica empedernida, me dejé atrapar por los recuerdos, fueron 10 años en esa empresa y hubieron muchos, muchísimos momentos. Y algunos buenísimos (éramos todos una panda de freaks, a ver qué día escribo sobre eso ...).

En esas estaba, cuando al darme la vuelta ¡zas! ahí estabas tú. De nuevo frente a frente: tú, 15 años más viejo, más calvo y más derrotado. Yo, 15 años más vieja, más gorda, y rodeada de personas que discutían sobre qué paredes tirar. Las mismas paredes que antiguamente compartimentaban TU reino. Qué rara es la vida: hace tiempo me abroncabas en cuanto tenías ocasión, y ahora estabas cortadísimo delante mío. Visiblemente azorado. Y, al contrario de lo que pudiera haber pensado cuando te odiaba tanto, no me gustó.

Me dio pena.

Intenté charlar contigo amigablemente, preguntarte qué tal todo ... iba de buenas y sin ningún ánimo de mortificarte, te lo aseguro. Pero estabas a la defensiva, y lo dejé estar. Desconfiabas de mí y no te culpo, en el fondo no me conoces. Si te hubiera interesado hacerlo cuando podías, te habrías dado cuenta de que soy rebelde, sí, y perra, ¡mucho! ... pero mala no. Eso nunca lo he sido. Pero tú piensas que todo el mundo es como tú.

Reflexión: si tu único concepto del poder se limita a vulnerar y humillar a los que tienes debajo, estás muerto. Porque mantenerse ahí arriba es difícil, requiere mucha energía, conlleva mucho desgaste, y aún fijando todo tu empeño en esa empresa, la permanencia en la cumbre no siempre depende de tu voluntad. Las putadas existen. Y debe ser MUY jodido caer, y de repente empezar a vivir tus días en una continua sospecha. Constantemente recelando y esperando que el de arriba te corte la cabeza como tú habrías hecho en su lugar.
Sed inteligentes, amigos. No hagais nunca a nadie lo que no os gustaría que os hicieran a vosotros. Parece fácil, pero hacerlo requiere de una reflexión y una autocrítica que no siempre llevamos a cabo.
Nunca se sabe a quién te vas a encontrar en el futuro. Ni en qué situación.

9 comentarios:

  1. Cuanta razón, me da mucha rabia la gente que se cree más que tú por ocupar un cargo superior...sobre todo teniendo en cuenta la cantidad de inútiles que ascienden a dedo!
    Yo estudié biología, después hice un master y estoy trabajando de secretaria, pero vamos, como si tuviera una etiqueta de anís del mono...¿qué pasa? ¿Soy menos que mi jefe o que algunos de mis compañeros "los ingenieros" porque soy la que pone los cafés?

    En fin, menos mal que mi felicidad no se basa en eso! :)

    Un beso!

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  2. Me ha encantado la historia, tanto que me lanzo a comentar por primera vez aunque os leo desde hace algún timepo... En mi vida laboral cuando más he ganado es cuuando pensaba que habia perdido la partida absolutamente, esta creencia, me ayuda porque ahora cuando me parten la cara me convenzo de que estoy ganando.

    P.D-.Lo de que comento por primera vez y os leo...bueno cuento la verdad, está bien soy un lelo!!! me acabo de dar cuenta de que estais varias porque yo solo me leí los post de cochinadas tanto el de la pajilla como el de la churrupailla y me parecieron sensacionales incluso pensé comentarlos en mi blog... ahora me doy cuenta de que la unica autora no es salamandra de la que tenía noticia por viveiro y molinos sino que estais varias. !disculpas!
    Creo que debo leer los blog en orden y no solo atraido por las palabras recurrentes como sexo.

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  3. Pelear, ya lo sabemos, fortalece más..y la vida es como un loop. Nuestra amiga C, diría algo del karma, del"tal faràs tal trobaràs.."....mi vieja, refranero con patas, diría..."a cada cerdo le llega su san martín"...
    Yo digo...cuánta miseria interior y soledad albergamos, cuando sólo nos creemos alguien en función del poder que ejercemos sobre los demás. Ni Dios, ni amo, ni bandera.

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  4. Joder qué coincidencias tiene la vida, llevo días intentando parir un post sobre vida laboral, pero no acabo de decidirme porque la realidad ha superado la ficción, así que te agradezco que me hayas iluminado, creo que seguiré dándole vueltas hasta hacerlo creíble.

    Por cierto, lo de tus ovarios toreros, damos fe querida! Aunque no sé yo si lo de no hacer a la gente lo que no te gustaría que te hicieran a ti es una buena fórmula... Hay gente muuuuuu rara! Yo por si acaso creo que volveré a no salir de casa sin látigo!

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  5. Fiona: lo bueno de todo es que la vida siempre te acaba dando "lo tuyo", así que no te extrañe que algún día se vean a ellos mismos poniendo cafés a "los biólogos" ;-)

    DDmx: Gracias guapo, ya sabes que las niñas estamos encantadas de tenerte por aquí

    ECDLC: ¡hombreeeee! ¡qué alegría! a mi sí que me tienes de seguidora hace tiempo. Me divierte mucho el rollete que os traeis entre Viveiró y tú (qué buenos sois, joíos), se nota que sois amigos de toda la vida ... más o menos como las que conformamos este blog. Somos varias sí, aunque me temo que la autora de las cochinadas se nos ha enamorado y ahora está demasiado en las nubes como para ponerse a temas carnalessss... pero seguro que vuelve, tu tranquilo que la cabra siempre tira al monte ;-)

    Sinco: cuánta razón teneis las tres, abanderadas de la sabiduría popular ;-)

    Kitty: Espero como agua de mayo tu post sobre la ficción superada, compañera, pero por ahi arriba tienes a otro fan de tu insuperable estilo "os voy a poner calentitos", así que no sé con qué nos querrás deleitar primero ...
    Y lo del látigo mmmhhh, confiesa que en el fondo de gushhtaaa ;-)

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  6. Que suerte estais teniendo, me encanta lo de que llegue el momento, no hay nada como esperar y ver el cadaver de tu enemigo pasar(proverbio chino).Yo si soy mala.

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  7. Pseudosocióloga: ¡Bienvenida al pisito! ... lo malo de ver pasar el cadáver de tu enemigo, es que normalmente pasa tanto tiempo que ya ni es enemigo ni es ná ... un simple desgraciado que te hizo llorar en un momento de tu vida pero del que seguramente hace años que ni te acuerdas ... y entonces el sentimiento que te embarga no es de justa venganza, si no más bien de penilla ...
    Por cierto, tengo que decirte que el nombre de tu blog me encanta ;-)

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  8. Que mal llevan algunos la falta sexo... Estoy convencido de q cuanto más se sube en la pirámide MENOS SE FOLLA!

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