Aquella mañana te corriste seis veces para mí. Como los cinco puntos para hacer explotar un corazón que Bill revela a Mamba Negra, aquellos seis orgasmos se me revelaron como la prueba irrefutable de un amor descomunal, un deseo imparable, como el demiurgo platónico de nuestra felicidad. A cada gemido tuyo le siguió uno mío y nuestros corazones ya nunca iban a latir separados, porque estallarían.
O sea que para encandelar a una perra para el resto de sus días tienes que correrte seis veces seguidas a la vez que ella ... ¿o si te corres seis veces seguidas a la vez que una perra no te dejará nunca más en paz?
ResponderEliminarEstoy confundido ;)
Como comentaba con la perra susodicha, yo nunca presumirira de correrme seis veces, puesto que me precio de no ser ni hombre.
ResponderEliminarY aunque tambien odio el futbol, en mi opinion, un ratio aceptalble, es el españa malta
Desde luego, qué mala es la envidia y qué floja teneis la......hombría.
ResponderEliminaraisssshhhh qué envidia... pero de la buena!!! Yo quiero ser una perraaaaa con una marca como la tuya
ResponderEliminar... os vais a quedar sin calsiooooor!!!!
ResponderEliminar¡Enhorabuena por esa experiencia! buena premisa la de los seis orgasmos para esa comunión de latidos del corazón...y de vida.
ResponderEliminaray q me corro
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