lunes, 21 de junio de 2010
Aquellos safaris sin fin...
A la pregunta ¿por dónde empezamos? yo siempre respondo por los pies, una buena descripción siempre va de los pies a la cabeza.
Y en eso estábamos, intentando poner la imagen de mi cuerpo en su imaginación, recorriéndome mentalmente con las manos, con la lengua, con los ojos... cuando pensé que ese recorrido, de abajo hacia arriba, iba a ser una cacería. Me sentí su presa desde el minuto uno.
Mientras me describía la ascensión, recorriendo mis piernas hasta llegar a las caderas ("a veces me gusta recorrer los alrededores del nirvana antes de sumergirme en él"), cerré un instante los ojos y atiné a decirle: "¿sabes?, cuando alguien sube desde los pies, si estás tumbada, cuando llega a las caderas es como ver a un depredador agazapado, sólo puedes verle los ojos... y sabes que estás muerta, que hagas lo que hagas estás perdida..."
A lo que él contestó: "...ese momento en el que la presa se sabe atrapada y en el que además se da cuenta de que le gusta... es magnífico. Lo único que puede hacer es dejarse llevar".
Gran momento, sí. Entonces pensé que no estaba tan mal ser la presa. Me imaginé ahí, con el corazón latiendo a mil, sintiéndome aprisionada, gozando de esa sensación de fragilidad y, al mismo tiempo, sabiendo que debía zafarme de mi cazador. Y de nuevo me instó: "...la presa necesita hacerle creer al depredador que no va a resultar una víctima fácil, que esa cacería no va a ser un paseo..." Claro, debo intentar escapar, aunque sepa que mi suerte está echada.
"...eso hace que se sacuda un poco, en una especie de baile que resulta más sensual que efectivo..." Cuánta razón lleva mi atacante, con cada roce, cada forcejeo aumenta la excitación dejándome sin fuerzas.
"...el verdugo nota que la víctima ha renunciado a toda escapatoria cuando roza suavemente con la lengua los pezones que no hacen más que delatar que la presa está gozando el peligro". ¿Será posible? Menuda zorra estoy hecha, moribunda y gozando!!!
Entre jadeo y jadeo alcanzo a preguntar: "¿Y como culmina mi rendinción?" A lo que responde: "El ataque final, descendiendo a la zona de ombligo y caderas, y ya no sobrevolar el nirvana, sino encerrarlo en espirales descendentes que terminan en la estocada mortal"
"Ha sido un precioso safari, el único problema es que me mates en la primera cita. Lo suyo sería que me resucites empezando el recorrido por la cabeza".
"Claro, no te preocupes. Si Bella Durmiente despertó no veo por qué no podrías revivir tú..."
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Bueno, después de los de Rodríguez de la Fuente, tu documental es de los que más me han gustado. Sobretodo la estocada final ... ;-)
ResponderEliminar:-)
ResponderEliminarG
Uhmmmm...esa G ahí solita es muy sugerente, ¿tendrá algo que ver con el punto de nieve y calor?...chi lo sa....
ResponderEliminarVaya, vaya... No sé si me inquieta más la sonrisita o la G
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