NEW YEAR'S EVE

Hace un par de días hablando con un amigo sobre las relaciones "chateras", me comentó que resulta difícil ser original para llamar la atención. Que cuesta competir con los demás porque no les ves, no les conoces y no sabes si serán más o menos agudos que tú. Estoy de acuerdo. Yo descarto automáticamente todo aquel que me entra con: ola, ola wapa, ke tal, foyamos... y demás. El nick también es decisivo. En esto estuvimos de acuerdo los dos.

En éstas le conté que me había hecho mucha gracia un tío que me entró un día con un mensaje elaborado, muy simpático del tipo: "...si te gusta ir a conciertos, si te conmueve una película de amor, si lees a kafka y lo entiendes... y además tienes cam y dos tetas como dos carretas... amémonos!". Era tardísimo y le hice saber que me había gustado pero que me iba a dormir. No creí que fuese fácil encontrar, de nuevo, un tío que se lo currara como éste y sí señor, dios existe!

Ayer haciendo el mal a altas horas de la noche, me parpadeó una pestaña con un mensaje interesante: "Si quieres pasar el fin de año en Nueva York, París, Moscú o la China (no recuerdo esta parte del texto) ... únete a mí y durante las 6 primeras campanadas te comeré el coño y las 6 restantes me la mamarás". Sí señor, esto es saber entrarle a una tía.
Le indiqué que me gustaba su propuesta pero que 6 segundos era... complicado y creí que nos reiríamos un ratito y para mi sorpresa la oferta iba en serio. Me espetó un ¿te atreves?, y claro, ya la hemos cagado. No se me pueden hacer estas preguntas. Respondí que sí que me atrevía, pero que había una serie de puntos importantes para que lo pudiera materializar. ¡Los aceptó todos! Me pidió vernos las cara para saber si estábamos interesados en continuar, o no. Pues parece ser que hay interés por ambas partes. Debo admitir que me sorprendió MUY gratamente.

Nos hemos dado 48 horas de reflexión. Cuando hablemos el miércoles tendremos que aportar ideas al plan, quiere que me involucre. Él se compromete a: venir a verme tantas veces como nos apetezca para irnos conociendo (vivimos en ciudades distintas) y a pagar los billetes del viaje y el hotel. Y para que no parezca que me está chuleando yo tendría que pagar alguna comida (de las de restaurante, se entiende) y la compra de algún souvenir o algo así.
Y digo yo, ¿por qué soy tan chulita?. No me iría nada mal que si alguien lee este post, me eche una manita con su opinión: ¿voy, o me rajo? A 24 horas de la reunión con el susodicho, creo que me apetece ir, aún sabiendo que es un poco una locura. Pero en algún momento, la cordura se apodera de mí y pienso que no debo hacerlo.
Como hizo en su día Sincopada para escoger su papel teatral, pido ayuda: ¿putita o cagada?