miércoles, 29 de febrero de 2012

LOS JUGADORES


Como si de una reunión de un Grupo de Apoyo Mútuo se tratara, voy a confesar: Hola, me llamo Kit. Soy jugadora y juguetona. Es decir, ludópata.

La vida es un tremendo, complicado y absurdo juego. Toda ella. Del inicio al fin. Así que hay que vivir apostando, ganando y perdiendo, comiendo fichas, matando y muriendo.
Puedes empezar la partida o unirte a una ya empezada, la cuestión es que sepas en qué juego estás. Si se trata de poner las cartas sobre la mesa y jugar a cara descubierta, o si por el contrario, toca poner cara de poker y ser un estratega.

¿Qué puta manía le ha cogido a la gente a hacerse suya la frase "donde dije digo, digo Diego"?
Coño, una apuesta es una apuesta. Tiene implicaciones en el resto de participantes, no vale largarse porque el resultado no es el que quieres. Apuesta más, juégatela, pásalo bien.
Los cobardes desprestigian una buena mano. Ponte el pitillo en los labios, no mires a los ojos y trama, urde, busca ganar. Y si pierdes, pues ya tienes la excusa para pillarte una buena toña con el ganador, y que encima pague.
La patraña que dice que lo importante es participar solo sirve para los niños, para evitar frustraciones. En el mundo adulto se juega para ganar. Para ganar pasta, para ganar prestigio, para ganar un polvo, para ganar lo que se desea, para ganar, ganar, ganar. El riesgo siempre es el mismo: perder. Y no nos engañemos, nunca se pierde con dignidad. El primero gana, el resto... el resto a tomar por el culo. Eso sí, llegar hasta el final, siempre.

Siempre he escuchado que el mundo es de los valientes (jugadores).
Y una mierda. Una mierda gigante.
Valientes hay cuatro (o tres, si me apuras).
El mundo es de los cobardes (trileros). De los que huyen antes de oír retirada. De los que al primer traspiés hay que darles la palmadita en la espalda y colmarles de apoyo.
Los jugadores somos unos tarados, una especie en extinción, estamos como putas cabras montesas. Nos puede más el placer del riesgo que el miedo al fracaso.
En cualquier terreno, en cualquier jugada, hay que ir a por todas.
Coño, una apuesta es una apuesta. ¡Hagan juego, señores!

11 comentarios:

  1. Y el gusto que te da cuando cuelas un farol... ufff

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    1. sí da, mucho. Pero yo soy más de jugar a cara descubierta, sin faroles.

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  2. jajaja, pero qué fina eres, cabrona.

    Para una buena jugada hay que tener buenos rivales. En eso tienes toda la razón.

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    1. ¿fina? ¿cabrona? jajajajajaja finas cabronadas que son verdades como puños.

      ¿Dónde coño están los rivales buenos? Ya me va tocando uno, no?

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  3. Si te pones es para ganar....es muy feo eso de rajarse a la mitad, de cagaos total.

    Yo habría puesto "Los jugadores" de Otto Dix, ¡¡coño, q sabes q me encanta!!.

    Me ha venido una cancioncilla a la mente....a ver si la encuentro...

    Kisses, darling Kitty.

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    1. aisssssshhhh y poco más puedo decir.

      Podría haber puesto los de otto dix, pero estos perretes me molaron.

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  4. ¡¡¡La encontré!!!!

    http://www.youtube.com/watch?v=i08x2QUyRCE


    TOMA YAAAAAAAAA IT'S ONLY A GAMEEEEEEE

    YOUYOU YOU ARE MY NEW GIRLLLLLL


    WOWOWOWOWOW!!!

    Bona nit

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  5. Aunque recién comienza este año...este post es y será el mejor,para mí, de este año,sin duda alguna. Un beso

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  6. Uau!!! Encantada con tu comentario. Para mí, sin duda, es uno de los jodidos del año, seguramente no será el último. Muchas gracias!

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  7. A mi lo que me pasa es que tengo poca paciencia, puedo empezar jugando bien pero luego me vengo arriba (sobre todo si acompaño, como suelo, el juego con la ingesta etílica...).

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