......
Sincopada: esta noche he tenido un sueño que me ha despertado a las cuatro de la mañana. Luego no he podido pegar ojo hasta, por lo menos, las cinco. Curiosamente, ese sueño me ha llevado a recordar otro, recurrente, que tuve muchas veces durante años y que era muy angustioso.
Doctor: cuéntemelos, empiece por el más reciente.
Sincopada: en el de hoy estaba en el jardín que hay en la parte trasera de mi casa. Es el jardín de mi vecino, es grande y lo tiene muy bien cuidado, y estaba delimitado por una riera, no había verjas, sólo árboles y la vegetación típica de las veredas de los ríos, chopos, cañizales, arbustos. Estaba hablando con él y me contaba una vieja historia que había ocurrido allí hace muchos años, algo que le pasó a él. Le habían encargado como trabajo trasladar unos presos muy peligrosos, psicópatas y asesinos de los chungos, de un lugar a otro. Él los llevaba atados con cuerdas y al pasar por el mismo sitio donde estábamos hablando, se le habían escapado todos. Al parecer durante semanas se dedicaron a cometer fechorías y maldades por toda la comarca y él se había hundido psíquicamente con esa historia....joder, a veces alucino con lo que maquina mi cabeza... .
Doctor: continúe....
Sincopada: todo eso encendía mi gran e insaciable curiosidad morbosa, siempre necesito saber más, nunca tengo suficiente, entonces él me daba un montón enorme de folios escritos donde se explicaba con pelos y señales toda la historia y cuanto había pasado después. Yo los cogía como si fueran un tesoro y caminaba hacia mi casa. Llegaba al patio y empezaba a trepar por la parra centenaria que hay en él, por la misma que trepan mis gatos, que llega hasta la terraza de la cocina y en verano da una sombra increíble. Me costaba mucho subir, la corteza de la parra se iba desmenuzando, me agarraba al inmenso rosal que hay junto a la pared, pero me pinchaba, con un brazo agarraba con fuerza los folios, ponía los pies en piedras que se caían, la casa es muy antigua, pero tenía clarísimo que iba a alcanzar la terraza de mi casa y ponerme a salvo con aquél legajo. Me decía: "por mis huevos que llego arriba". Al final lograba saltar la barandilla y soltar todos los folios, que se desparramaban por el suelo de la cocina, pero estaba inmensamente satisfecha y con ganas de empezar a leer aquella historia.
Doctor: ¿y qué sueño ha enlazado usted con este?.
Sincopada: uno que me persiguió durante años, desde los 12 hasta los 21, más o menos. En él salía al balcón de casa de mis padres y éste estaba inclinado. Me ponía de rodillas pero no podía evitar deslizarme hacia la barandilla, al final caía y me quedaba colgando de ella en el vacío, en plena calle Cerdeña, que es donde vivíamos, una calle grande y muy transitada. Y ahí estaba yo, colgando, una y otra vez, agarrada a los barrotes. Me despertaba angustiada y de todas las veces que lo soñé, en pocas ocasiones llegaba a soltarme, pero alguna vez lo hice, despertándome de un salto. Es curioso, porque me fui de casa con 19 años y aún seguí teniendo ese sueño durante algunos años más. Y siempre sabía lo que iba a pasar, y aún así salía al balcón aterrada y a cuatro patas y acababa colgando otra vez más en el abismo. En aquél momento, cuando empezaron los sueños, mi mundo se venía abajo y la calle y mis amigos eran mi tabla de salvación, el oxigeno que necesitaba respirar. Aún así supongo que eso era peligroso y yo lo intuía.
Doctor: hay una clara correspondencia entre ambos sueños, en los dos aparece una terraza, pero en el de esta noche las connotaciones son totalmente distintas a las de su pasado. Entonces existía un peligro evidente fuera de su casa y aún así usted salía a buscarlo. Ahora, aunque también su vida pasa por dificultades, está decidida a llegar hasta arriba como sea, pese a ellas, ¿hay algún hecho reciente, de estos últimos días, que crea que puede haberla llevado a soñar esto?.
Sincopada: sí, creo que lo hay. Y fue ayer mismo. Me pasé todo el día en un viaje más que surrealista con mi amiga C., aquella que le conté que había sido víctima de abusos sexuales cuando era una niña, y estuvimos horas y horas hablando de nuestras cosas, de nuestras vidas. Aún le estoy dando vueltas a todo cuanto hablamos. En un momento de la conversación le dije que soy una insatisfecha, que pese a tener todo cuanto puedo necesitar para ser feliz, siempre quiero más, siempre necesito seguir buscando y guardando y experimentando. Y nunca sé que es lo que busco, pero no dejo de hacerlo. Ella me dijo que para qué guardo tanta mierda, tanto física como psíquica, que empiece a tirar cosas y a repartir a cada cual lo suyo, para poder vivir más ligera. Y creo que en eso estoy. En el mismo momento en que me lo dijo, pensé en mi madre. Ayer fue su cumpleaños y la llamé, hacía semanas que no sabía nada de ella, sólo por lo que me cuentan mis hermanos.
Doctor: ¿cree que una parte de esa, digamos, "mierda", puede corresponderle a su madre?.
Sincopada: creo que sí, pero necesito identificarla primero, y tampoco sé si hace falta dársela a ella con el daño que eso conlleva, o sería mejor saber qué es y vivir con ella.
Doctor. ¿qué cree que le queda por leer de esa historia que usted llevaba a cuestas y que le hacía más difícil el camino a casa, a salvarse?.
Sincopada: aún no lo sé, pero sé que aquellos folios eran mi historia, mi vida, y que quiero leerla entera, conocerla y poder vivir con ella.
Doctor: importante. Lo dejamos aquí, en esa historia por conocer. Pero recuerde, muchas de esas cosas ya las ha aprendido, y las sabe... .
Cuando he abierto el bolso en el párquing para pagar, en él he encontrado un caracol. Verídico.
Despacio, voy despacio.....pero subo.
Siempre he pensado, que los sueños, son mensajes...Cuanto misterio hay en el subconsciente...De todas formas, el doctor ese, no me convence...
ResponderEliminarno hay misterio, sólo cosas por saber...de todas formas, la calidad del doctor no es cuestionable, es una eminencia...besos.
Eliminarla vida es sueño y los sueños sueños son
ResponderEliminarSomos sueños, amigo, somos sueños... .
EliminarMe has hecho muy feliz, te añoro, so cabrón.
Kissessssssss.
Los sueños son curiosos, sorprendentes, y no tiene mucho sentido encontrarles razón. Un sueño recurrente que he tenido y sigo teniendo es que estoy en la universidad en un examen, me empeño en demostrara que estoy trabajando, argumento mi experiencia, el título, pero no sirve para nada, reset. También la noche de algún exceso fluyen sueños más confusos o incluso retorcios, pero por suerte tengo muy pocas pesadillas. Los sueños son curiosos, sorprendentes, y...
ResponderEliminarLas noches de excesos es cuando mejor dejamos fluir al inconsciente, desinhibirse de vez en cuando está bien y es necesario.
Eliminar"La gran pesadilla es despertar cuando no se tiene otro lugar más allá de los sueños"....
Kisses.
El cerebro no juega a los dados, tampoco.
ResponderEliminarCierto, muy cierto. El azar sólo existe en nuestro deseo de ser inmortales y de creer que hay cosas que escapan a la razón. Todo es asquerosamente real.
EliminarKisses!!
Ainssssss... me suena esa frase: "Importante. Lo dejamos aquí..."
ResponderEliminarTodas las semanas me quedo en algo importante que debo dejar en algún punto. Mi realidad es tan pesadillesca que, mi doctora, no quiere ni oír hablar de sueños.
Estoy con C., tienes que vaciar el disco duro, el disco externo, la memoria RAM y el puto trastero. Vacía, vacia, vacía!!!
Querida, con cariño te lo digo: FOT-LI, collons!
FOT-LI????? eso me suena que lo gritaba yo al Cabezalí el sábado pasado, he tenido un flashback, joder, qué ciegas íbamos, amiga, y qué bien nos sentó aquello.
EliminarReinstalando el sistema.....
Kisses, darling Kitty!!!
Yo no vuelvo a mi pasado ni loco.
ResponderEliminarMe parece una pérdida de tiempo terrible.
Cuando acabemos de poner todo en orden desde nuestra infancia hasta hoy ya estaremos medio muertos. Por no hablar de que se sufre haciéndolo.
Prefiero cargar con mi mochila de traumas y seguir caminando.
Besos.
Ay, Toro, esta vez discrepamos. Te pondré un ejemplo.
EliminarHace años, mi amiga C. y yo estábamos en Barcelona haciendo un curso sobre "cómo afrontar transtornos de comportamiento en personas con demencias severas". En uno de los talleres, para distendir la cosa, una psicóloga nos hizo hacer un ejercicio de reminiscencia. Todos, unos 15, debíamos cerrar los ojos y pensar en nuestra infancia, y retener la primera imagen que nos viniera a la cabeza. De todos los asistentes, mi amiga C. fue la única que dijo en voz alta que "no recuerdo nada absolutamente de mi infancia". Ese día tuve claro que algo horrible le había pasado siendo una niña, ella también se dio cuenta de que no era normal. Con el paso de los años quiso saber por qué desde siempre se había sentido una mierda de persona, por qué había autodestruído su juventud, por qué en muchas ocasiones la vida le parecía una gran mierda y había tenido ganas de quitarse de en medio.
Quiso saber. Hoy por hoy, ahora que lo sabe, ahora que ha podido repertir la mierda que le correspondía a cada cual en su familia, ha vuelto a nacer. Dicho por ella.
Ella no podía viajar más con esa mochila, Toro, con esas toneladas de culpa y de asco. Todos aquellos recuerdos, algunos escalofriantes que no voy a contar aquí, aparecieron en sus sesiones de terapia.
Joder, toma rollaco......
Besos!!!!!!!!!!!!!!!
Pues no sé qué decirte. En algo estoy de acuerdo con Toro, y es que no sé en qué puede ayudarte acordarte de tus 12 años y de tu hogar roto, ahora, casi 30 años después. Ya sé que se supone que tu pasado te convierte en la persona que eres, pero ¿y qué?. A mi me gusta en quién te has convertido, con tus instatisfacciones incluídas.
ResponderEliminarJoder tías, que solo se vive una vez. Vivamos coño. P'alante, no p'atrás.
¿se nota que estoy harta de terapeutas? ;-)
Querida Lagartona, parece mentira que tú me digas eso, mujer....lo importante es querer saber, querer resolver, lo que viene después es CONSTANCIA y TRABAJO, por mucho que duela. Es como ir la dentista, por ma´s que lo eludas, si algo está picado acaba jodiendo la existencia, mejor localizarlo y arreglarlo, ¿no?.
EliminarY claro que vivimos, será por vida, tía, si no paramos de vivir, coño!!!.
Kisses, reptiliana.
hazle caso el doctor sinco, aligera, y lanza tu cometa hacia el cielo!
ResponderEliminarjoer, mestre, qué bonito eso de lanzar la cometa, hace tiempo ya que vuelo alto, dejándome llevar por ráfagas y parones, y desde arriba todo se ve muy seco.
EliminarKisses.
Soñar es una pasada de por sí, y también creo que ayuda mucho a conocerse. Si se intentan entender los sueños como tú has hecho, siendo sincero con uno mismo, se sacan conclusiones muy interesantes.
ResponderEliminarLo de volver al pasado es algo muy personal, a mí me gusta de vez en cuando, siempre que no impida disfrutar del presente, claro.
Los sueños son una flipada, en este nuestro cutreblog ya se ha hablado alguna otra vez. Tampoco es necesario ser un pesao y querer analizarlo todo, pero los sueños recurrentes suelen tener importancia en nuestro inconsciente, y está bien echarse un ojo p'adentro de vez en cuando.
EliminarEl pasado siempre está, lo que hay que hacer es mirar para delante, pero sin olvidar.
Kisses.
También tenía yo un sueñecillo con un balcón que me producía vértigo y que se repitió muchas veces ahora que lo comentas. Hay que tirar mierda por la borda, querida, hay que escupirla, que si no podemos ahogarnos. Recibe kisssssses, claro.
ResponderEliminarEs muy recurrente lo de los balcones o precipicios, generalmente van unidos a momentos de cambios, peligros o miedos de nuestras vidas.
EliminarSí, lovely Johnny, la mierda hay que tirarla por la borda, pero a veces falta identificarla, porque aunque huelas que la llevas pegada al culo, no sabes de qué color ni textura es. Estamos trabajando en ello (con acento mexicano te lo digo, fíjate tú).
Kissessssssssssssssss.
pues eso, calma, no ens precipitem, dialoguemos con el pasado, los sueños, las sincronicidades, habitemos el inconsciente, somos más el inconsciente que la conciencia, análisis pero sin parálisis
ResponderEliminar¿Calma, y me lo dices tú?...a bodes em convides, amic meu.....
Eliminar¿Parálisis?...sólo la Permanente.
Love you. Kisses.
Lo que se queda a medias tarde o temprano sale. Y si te acostumbras a ello y si lo llevas contigo y no lo solucionas pues, simplemente, pasa que nunca llegas a ser feliz, y me refiero a ser feliz de verdad, no a tener momentos felices con amigos y tal. Me refiero a cuando estás sola en tu casa y una niña de 12 años te mira a los ojos fíjamente.
ResponderEliminarHablar con un psicoanalista es como hablar sólo, o frente a un espejo, es sano y punto. Cuando hablo con aquella niña de 12 años, cuando la miro a los ojos, veo miedo y asco en su mirada (y no en Las Vegas, precisamente).
Eliminar¿Ya te has hecho "LaDébiladicto"?, ¿me haces los deberes?. Grrrrrrrrr....do it!!!.
Kisses, esgarrador.
Los he escuchado en el Myspace y me gustan. Yo otra cosa no, pero aplicado, tampoco. je,je. Por cierto, he escrito un cuento inspirado en este post. Cuando esté acabado te lo envío.
EliminarBesicos
Bon minyó!!!! Me gustan, sobre todo "Uralita", "Rosario" y "Averigua cuál", son patateros, pero molan mucho.
Eliminar¡Qué alegría inspirar algo a alguien, aunque sea para caer por los terraplenes!...friso per llegir-lo....
kissessss, esgarrador.
Pues yo en este tema estoy un poco dividida. por un lado pienso que no vale la pena remover la mierda pasada. Es una forma de torturarse muy bien vista, pero no sé hasta que punto le sirve a una persona revivir hechos dolorosos de su vida. Una cosa es ser consciente de que estos hechos han pasado y trabajar para que estos hechos no condicionen tu vida, pero otra muy distinta es revivirlos cada mes en una sesión de una hora escasa. Por otro lado también pienso que enfrentándote a las cosas es la única manera de avanzar. Encontrar la justa medida es lo complicado. Besazos mil!!!!!!
ResponderEliminarQueridísima amiga, es cierto. Revivirlos en bucle no sirve de nada, pero cuando afloran es por algo, están ahí, duelen, hay que acabar de digerir, nada más.
EliminarYa sabes que soy una hedonista y generalmente feliz o muy feliz, pero en ocasiones la bestia negra asoma el pescuezo y no me queda otra que prestarle atención, porque va conmigo.
Te echo de menos, la otra noche casi no hablamos, joder, ¿o íbamos muy borrachas y la memoria me tergiversa el tema?.
Besosssssssss.
A mí se me escapó una hembra carcelaria una tarde. Cuando quise darme cuenta había construído un horrible y peligroso yo. Ahora me siento responsable del desastre pero sigo hinchándome abajo cada vez que pienso en aquellas cadenas abiertas sobre la mesa.
ResponderEliminarMe la imagino como ésta, Chus...
Eliminarhttp://www.filmaffinity.com/es/film414842.html
...y cualquiera no se pone cachondo....
Lo mejor es la sinopsis, me ha encantado:
"Una sufrida ama de casa (Allison Hayes) se cruza en el camino de unos extraterrestres del espacio exterior... que la hacen crecer y crecer hasta los 50 pies de altura."
Es importante, ante todo, matizar si los extraterrestres son del espacio exterior, porque si son del interior estamos arreglaos....
Kisses.